IE El Pilar

DE 1927 A 1940

Finalizada la guerra del Rif, con la paz, vuelve a aumentar la población escolar en el colegio marianista de Tetuán, entonces regido por Carlos Eraña, que fue director desde 1927 hasta 1933. El prestigio del centro comienza a resurgir de nuevo tras un período en el que las desavenencias surgidas entre los miembros de la comunidad marianista y la opinión de algunos ciudadanos influyentes hicieron mermar la confianza de la población hacia su labor educativa. La «Casa Escriña», sede del Colegio, queda pequeña y es necesario buscar nuevos locales, puesto que la demanda de plazas escolares aumenta de forma vertiginosa. Carlos Eraña eligió y adquirió en el Paseo de las Palmeras, hoy calle Mauritania, el solar del actual edificio. Con el advenimiento de la República, el 14 de abril de 1931, la legislación laica obliga al colegio a admitir alumnas, y a pesar de las presiones de la legislación republicana que prohibe a las congregaciones religiosas el ejercicio de la enseñanza, el Colegio del Pilar de Tetuán continua su labor bajo la dirección de los marianistas. A comienzos de 1933, el Centro, dirigido ahora por Ángel Chomón, cuenta con 320 alumnos y una organización sólida. La comunidad marianista está formada, además del director, por el sacerdote Elíseo Mata, capellán y profesor de Filosofía; Luis Pecina, profesor de la sección de la Carrera Mercantil; Ciríaco Alzóla, profesor de Ciencias y encargado de los deportes; Antonio Farras, como profesor de Letras; Julián Iturmendi, Máximo Gómez, Félix Indaberea y otros cinco religiosos más. El 3 de octubre de 1934 «El Eco de Tetuán» publica los resultados de los exámenes del curso anterior: 33 matrículas de honor, cinco de las cuáles son chicas. El edificio actual comienza a construirse el 20 de agosto de 1935. Son tiempos de agitación social en España y de sentimientos anticlericales que de alguna manera también se reflejan en Tetuán. Durante su construcción, el edificio sufre el estallido de una bomba de dinamita en la esquina suroeste, el jueves 23 de abril de 1936 a las diez de la noche, y el 9 de mayo siguiente aparece muerto en circunstancias extrañas el guarda de noche El 17 de julio se produce el alzamiento de tropas españolas contra el gobierno legítimo y comienza la Guerra Civil en España. El primero de octubre de ese mismo año, comienzan las clases en el nuevo edificio, si bien la inauguración oficial no se efectúa hasta el 17 de octubre de 1937. A la inauguración asiste Juan Luís Beigbeder, Alto Comisario de España en Marruecos, y el Gran Visir Sidi Ahmed el Ganmia, primer ministro del Jalifa de Tetuán, acompañado del Bajá de Tetuán. El nuevo director del Centro es el sacerdote Julián Angulo Zaldivar. El curso 1938-39 comienza con trescientos alumnos. El nuevo edificio de la calle Mauritania permite la existencia de alumnos internos. Son tan numerosas las peticiones de plazas desde las diversas ciudades del Protectorado Español, que la dirección del Centro se ve en la necesidad de albergar hasta cuarenta y un alumnos internos. A pesar de la guerra en España, en Tetuán hay normalidad absoluta. Por fin acaba la Guerra Civil. El 6 de mayo de 1939 el Colegio fue reconocido como Centro legal de enseñanza para efectos de exámenes de paso de curso en el Bachillerato. Ese mismo curso profesores y alumnos del colegio son felicitados por el tribunal de catedráticos de la Universidad de Salamanca que los había examinado, por ser los mejor preparados de todo el Distrito Universitario en el Examen de Estado (prueba de acceso a la universidad de la época). El curso 1939-40 transcurre con el escuerzo diario de una tarea que exige la normalidad después del agitado período de la guerra civil. Al finalizar el curso es elegido nuevo director el sacerdote Cayo Fernández de Gamboa.